La resistencia al cambio puede ser una actuación que puede
complicar la situación de la organización, ya que los cambios se están produciendo y
es necesario adaptarse a esos cambios para que la empresa sobreviva o se haga
más competitiva. Algunas empresas no se deciden a hacer cambios hasta que notan
malos resultados, una gran pérdida de clientes, de ingresos o cuando notan que
algo va realmente mal, cuando lo que deberían hacer es adaptarse antes a los
cambios para que esta situación no se hubiera dado.
La adaptación a acontecimientos externos puede dar lugar a reticencias
y tensión porque hay que hacer un reajuste interno y dar lugar a objeciones por
parte de las personas que se tienen que someter a estos cambios, les cuesta y
pueden negarse a colaborar, pueden hacerlo pero sin demasiado ámbito o pueden
acceder pero cometer fallos. ¿Qué se puede hacer ante esta situación? Mantener
una buena comunicación interna en la organización que haga entender a los miembros
las razones y mejoras que suponen los cambios; y además es necesario ofrecer a estos una buena posibilidad de formación y capacitación que les
permita adaptarse a los cambios con facilidad.
La resistencia al cambio es algo normal porque puede dar lugar
a inseguridades, miedos, mayores necesidades, incertidumbre y otras actitudes,
sin embargo el cambio se convierte en ocasiones necesario para el buen
funcionamiento de la organización.
Según Kurt Lewin, existen tres causas para la resistencia al
cambio:
- La cultura organizacional que guía la conducta de lo miembros que se sienten amenazados cuando hay que hacer cambios radicales.
- El interés propio, las razones que afectan al deseo al cambio, como la costumbre o la motivación y capacitación.
- La percepción de metas y estrategias de la organización, no entendiendo porque se necesita un cambio o meta nueva.
Algunas razones principales para la resistencia al cambio en las
empresas son:
- Miedo a no poder aprender las nuevas destrezas o conocimientos que se requieren
- Poca flexibilidad en la empresa
- Miedo al fracaso
- Mayores responsabilidades laborales
- Menores responsabilidades laborales
- Baja confianza en la empresa
- Miedo a menor interacción social
- Amenaza del puesto de trabajo, sueldo u otros beneficios
- Amenaza al estatus en la empresa
- Falta de información y conocimiento de por qué se hace
- Miedo a lo desconocido
Para poder vencer la resistencia al cambio de la empresa hay que ser
consciente de que esta resistencia existe, intentar conocer las causas que dan
lugar a esta resistencia al cambio y luchar contra las causas que dan
lugar a ello de la mejor manera posible. En ocasiones basta con una buena
comunicación en la empresa.
Hay que comprender que muchas veces los cambios son
buenos, que los cambios son una variable permanente en la empresa y en la vida,
y hacérselo comprender a los demás.
Pierre Cubique.·.
Pierre Cubique.·.
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