"Cada Gerente tiene su propia personalidad, formación, experiencia y
capacidades que le hacen siempre diferente a los demás. Asi la gerencia al igual que en la masonica se prepoaran lideres del mañana siempre enmarcados en la escule moral y de buenas costumbres, donde ellos y sus empleados puedas abanderar la consigna de libertad, igualdad y fraternidad.
Acá algunas de las caracteristicas del verdadero lider;
Capacidad de trabajo
La capacidad de trabajo, podemos entenderla como la posibilidad de
pasar muchas horas trabajando, con intensidad alta, la necesidad de largas
sesiones de trabajo en equipo con colaboradores, de negociación con clientes o
proveedores, de análisis de problema de la empresa, por poner unos breves
ejemplos.
Requiere constancia, “aguante” físico y mental, paciencia y
perseverancia en la tarea que se tiene entre manos.
Es una capacidad necesaria para soportar la dura lucha que, con
frecuencia, ha de librar cada mañana y cada atardecer un Gerente, con
frecuencia solo- al final- ante su problema y su necesidad de tomar decisiones.
Espíritu de lucha
Un Gerente ha de ser un luchador. Un gladiador en medio del circo,
repleto de leones. La vida de la empresa es cada vez más dura y exigente.
La competencia entre empresas y negocios, con frecuencia salpicada de
trampas, zancadillas y mucha agresividad, hace que haya que salir a la palestra
del mercado y de la sociedad a ganar la batalla de cada día.
No son tiempos de gentes medrosas, ni timoratas. No sirven los que
tienen miedo y vacilan ante la toma de decisiones empresariales o se quedan
clavados en la rutina de cada día, siempre más cómoda que ir a por todas y
pelear en el mercado de la empresa.
Este espíritu de lucha no ha de entenderse como un espíritu agresivo,
capaz de llevarse por delante y “triturar” al que se ponga por delante, ha de
entenderse, más bien, como espíritu deportivo, de lucha en pos del
triunfo...pero, sin ir “cortando cabezas” o “dejando cadáveres “ por doquier.
Perseverancia y constancia
Ya las hemos mencionado antes como componentes básicas de un perfil
gerencial. Sin esa perseverancia renovada de cada mañana, ni esa constancia de
la brega ante todas las dificultades- que seguro aparecerán en el horizonte de
la empresa- no es posible la mayor parte de lo señalado hasta aquí.
Fortaleza mental y física
Quien no está ni se siente fuerte por dentro y por fuera, es decir en
su mente, en su psiquis y en su cuerpo, lleva un fuerte lastre para dirigir
bien la nave de la empresa. Y con frecuencia, andará a bandazos.
La fortaleza mental y física se tiene, pero también se adquiere y se
mantiene.
Esto lo saben bien aquellos Gerentes o directivos que organizan su vida en base
a dedicar un “algo” de su tiempo a este aspecto de la conservación de un buen
nivel mental y físico.
La solución no va por la vía equivocada –aunque bastante de moda en los
últimos años entre los profesionales jóvenes y llenos de lógicas ambiciones de
progreso- de buscar estímulos artificiales.
“No está en el uso de
sustancias o productos que momentáneamente estimulen la mente, ayuden a
soportar la presión y el esfuerzo, apoyen la capacidad de hablar y dar buena
imagen.”
Esto es una forma de engañarse que lleva al fracaso más o menos
rápidamente.
No sirve apoyarse en ejemplos del mundo circundante. La fortaleza
mental y física se mantiene por medios tan absolutamente naturales, como la
combinación de los tiempos de trabajo, de descanso, de vida de familia, de
relación social, de ejercicio físico, de algún pequeño hobby...
En la vida del Gerente y el directivo seguramente ocupará mucho más
tiempo-medido en horas- el trabajo que el resto. Pero esto, que no es cuestión
tanto de cantidad como de calidad, no ha de llevar a anular todo lo demás.
Capacidad de liderazgo
Este aspecto es quizás el que está más de moda en estos momentos. Los
gurus de la vida de la empresa, casi siempre con nombre en inglés y residencia
en los EEUU, han descubierto el valor del liderazgo en las organizaciones. Algo
que siempre ha sido absolutamente obvio.
No cabe ser un Gerente- perdurando en el puesto- sin capacidad de
liderazgo. Los empleados de la empresa necesitan al “patrón” de la embarcación
que es la empresa, requieren que alguien les guíe con sentido hacia alguna
parte.
El líder, que ha de estar dotado de la mayor parte de las capacidades y
aptitudes mencionadas antes en este trabajo, es aquel que toma el timón y dice
¡seguidme! Y los demás, que creen en él y en sus posibilidades, le
siguen.
Pero ese espíritu de liderazgo se viene abajo, ante actitudes tales
como el autoritarismo, la incomunicación, la inconstancia, la falta de un
criterio objetivo, los bandazos de carácter o de trato...
Integridad moral y ética
Quizás sea este uno de los puntos más discutidos en esta cuestión que
nos ocupa. Es posible que buenos Gerentes que lean hasta aquí, dejen de estar
de acuerdo en este punto. Parece como si la integridad moral y la ética ya
fuesen cuestiones de otra galaxia, poco terrenas en el siglo XXI.
Nuestra opinión es que no es así.
El que no tiene o no actúa con integridad y ética en su vida
profesional o al frente de sus negocios, busca el beneficio de su empresa y el
alcanzar sus objetivos como sea, a costa de lo que sea, sin barrera.
La moral y la ética empresarial parecen poner límites a esa actuación.
Y así es en efecto. Existe la licitud y la ilicitud de los actos,
también en la vida de la empresa.
“No todo vale. No todos los
medios son justos ni debieran usarse.”
Lo contrario es la selva, la lucha a cualquier precio.
Todos haríamos lo mismo, al margen de leyes y sin barreras. Y la
experiencia demuestra que quien actúa, al frente de sus negocios, sin el menor
resto de moralidad y ética, acaba siendo devorado por esos mismos métodos. Otros
harán con él lo mismo que él hace con otros.
Y además, existe siempre un rechazo colectivo a los comportamientos sin
ética ni moralidad.
Y, por terminar este punto, el Gerente o directivo ha de ser una
persona que pueda dormir tranquilo, sin el sobresalto de lo que pueda suceder
por desarrollar su trabajo y su importante función empresarial, lejos de todo
comportamiento moral y ético.
Espíritu crítico
Hemos dejado para el final esta faceta, tan importante en la vida y en
el mundo moderno. El Gerente debe de tener espíritu crítico. Ha de ser capaz de
no dejarse llevar por la corriente, de no tragarse “ruedas de molino”.
Ha de saber discernir entre toda la información que le llega, aquella
que es fiable de la que no lo es. La que le interesa de aquella que es
irrelevante o no sirve.
Y esto es una actitud tan válida a la hora de una reunión de trabajo
con sus colaboradores como ante la lectura de la prensa o el ver la TV.
Sólo con espíritu crítico es posible una toma acertada y fundamentada
de decisiones. Y esto es tarea diaria de un Gerente. Tomar decisiones que la
empresa requiere que sean acertadas.
De todo lo anterior pudiera concluirse que el Gerente ha de ser una
especie de Superman. Y esto es verdad a medias.
De un lado no se requiere dar el 100% en todas las capacidades y
aptitudes reseñadas. Eso sería imposible. De otro, cuanto más y mejor se
detenten todas o parte de ellas, mejor preparado se estará para el ejercicio de
un puesto gerencial.
Se habrá ya reparado que no
hemos indicado nada acerca de la titulación académica, la formación profesional
o la experiencia del Gerente. Y así es.
Se debe a que esa es otra dimensión. Estos componentes curriculares de
un Gerente, sin duda ayudan, son herramienta válida. Pero la cuestión primordial
es que sin esa serie de capacidades que hemos comentado, formando parte del
perfil personal en mayor o menor medida, es más difícil triunfarcomo Gerente
Pierre Cubique.