La historia de la masonería alemana entre 1760 y 1810, fecha de la
publicación de “Los tres documentos más antiguos de Krause” puede
dividirse en tres períodos.
El primero, que abarca desde 1760 hasta 1782, está caracterizado por el dominio de los grados superiores, de procedencia francesa, sobre los grados simbólicos, así como por una situación generalizada de caos y de divisiones internas.
Karl Gotthelf, barón de Hund y Altengrotkau (1722-1776) se inició en la
masonería en 1741. En 1742 en París se integró en los caballeros de
Escocia, que se proclamaba continuadora de la Orden del Temple y cuyo
Gran Maestre era supuestamente el pretendiente al trono de Inglaterra
Carlos Eduardo Estuardo. De regreso a Alemania, en 1751 fundó el
capítulo de la Estricta Observancia "Los tres pilares", defendiendo la
idea de que la masonería había heredado el legado templario
Entre 1760 y 1782 dominaron la escena masónica en Alemania
fundamentalmente tres Sistemas: el de la llamada Estricta Observancia,
propagada sobre todo por Karl Gotthelf von Hund; el Sistema Clerical,
fundado por Joh. Aug. Stark; y el Sistema Sueco, introducido en Alemania
por Joh. Wilh. Kellner Zinnendorf y conocido también allí como “Sistema
de Zinenndorf”. Los tres Sistemas eran en realidad derivaciones del
Sistema Templario constituido formalmente en Francia hacia el año 1742
que a su vez derivó de la introducción de los llamados grados escoceses.
A estos tres sistemas se unían además entre- cruzamientos no siempre
controlados con sociedades secretas no masónicas, como los Rosacruces
alemanes, los Iluminatis o los Hermanos Asiáticos. En líneas generales,
la separación casi total de la masonería alemana de aquella época de la
masonería inglesa, constituía la otra cara de la moneda del intento de
transformación de la Hermandad en la línea de una reedición de la Orden
de los Templarios. Las “Constituciones Antiguas”, a las que Anderson se
había referido de una manera tan explícita en su libro de las
Constituciones, y que ya habían sido impresas en Inglaterra el año 1725,
habían permanecido en Alemania totalmente ignoradas. Desde la llegada
de la Estricta Observancia (1763), las constituciones de Anderson en sus
ediciones de 1723 y 1738 (que en 1741 habían sido traducidas al alemán)
y que, hasta entonces, habían sido más o menos altamente estimadas por
las logias alemanas y, en la medida de lo posible, seguidas con
precisión, fueron paulatinamente arrinconadas.
Johann August Starck (1741-1816) fue profesor de teología. Mientras
estudiaba en Göttingen, se hizo masón en 1761 en una logia militar
francesa. En San Petersburgo, un masón griego, el conde Pedro Melesino,
teniente general del Ejército Imperial de Rusia, le "reveló" que
ciertos masones que procedían de los Caballeros Templarios, habían
heredado una supuesta sabiduría secreta de los antiguos egipcios y de
los judíos. De vuelta a Alemania en 1772, Starck se adhirió al
movimiento de Karl Gotthelf von Hund, ayudándole a fundar la Estricta
Observancia Templaria. En 1776 fue nombrado capellán de la corte
superior en Königsberg, profesor de teología y superintendente general
de las escuelas de Prusia Oriental. Escribió algunas obras con enfoque
deísta defendiendo una religión natural que estaba en la base de las
diversas religiones. Influido por el abate Barruel, mantuvo que los
Illuminati, un grupo pseudomasónico fundado por Adam Weishaupt
(1748-1830) en 1776, estaba detrás de la Revolución Francesa para
imponer un régimen sin Dios y sin ley en tierras alemanas y en otros
lugares.
El segundo periodo, desde 1782-1783 hasta el cambio de siglo, destaca
por el surgimiento de movimientos reformistas unos más locales, otros
más regionales, orientados a sacar a la Masonería del caos en el que se
hallaba sumida, volviendo los ojos hacia la pureza de la masonería
inglesa simbólica. Esta segunda etapa de nuestra división de la historia
de la masonería alemana se inicia en el año 1782 con la convocación del
Convento de Wilhelmsbad. Este Convento fue convocado por el Duque
Ferdinand von Braunschweig. Su objetivo era doble. Se trataba de
intentar reunificar a la dividida masonería alemana. Y para ello se
proponía estudiar y dar una respuesta a la pregunta acerca de «si la
opinión dominante en la Estricta Observancia, de que la Masonería era
una continuación de la Orden de los Templarios, estaba basada en la
verdad y podía ser demostrada históricamente. El Convento no consiguió
el objetivo de la reunificación. Pero la Estricta Observancia recibió un
golpe de muerte por cuanto la pregunta planteada fue resuelta de una
manera más bien negativa y, como consecuencia, se abandonó la idea de
una Masonería continuadora de la Orden templaria.
El Convento de Wilhelmsbad abrió así la puerta al surgimiento de
movimientos reformadores. Al año siguiente, en 1783, nació en Frankfurt
am Main el primer fruto reformista: la Alianza Ecléctica. La finalidad
de esta Alianza consistía en «vivificar nuevamente a la Masonería, y en
liberarla de todo lo que oliese a “Sistemas” así como de los grados
superiores. O dicho de una manera constructiva: su finalidad era la de
“restituir el arte real de la antigua Masonería”. Sin embargo, como ya
indicamos antes, estos intentos tuvieron resultados muy pobres.
Finalmente, el tercer periodo, desde el cambio de siglo hasta 1810, está
marcado por el nacimiento de fuertes corrientes reformistas con la
misma finalidad que sus predecesores inmediatos, pero con el apoyo de
una auténtica investigación histórica critica sobre los orígenes de la
Hermandad y sobre su verdadera naturaleza. Krause va a constituir la
coronación de este tercer período, la cresta de la ola.
Precisamente esta conjunción de buena voluntad y de conocimiento crítico
de la historia de la Hermandad Masónica, y de la naturaleza de la
Masonería, fue la que se dio cita en la actividad reformadora de un
reducido número de masones, actividad que alcanzó un punto culminante
alrededor del nacimiento del nuevo siglo XIX:. Johann August Schneider
en Altenburg, Friedrich Ludwig Schroder en Hamburg, Ignaz Aurelius
Fessler en Berlín y Friedrich Mossdorf en Dresden son los cuatro grandes
nombres que inician el tercer período mediante la investigación
histórica. Por caminos independientes, los cuatro llegaron a un
resultado común: el de que la masonería no surgió de ninguna Orden de
Caballeros, sino de los gremios medievales de constructores.
Fernando de Brunswick-Wolfenbüttel (1721-1792), príncipe de Brunswick-Wolfenbüttel-Bevern, duque de Brunswick y Lüneburg y mariscal de campo prusiano. En 1740 en la Logia Masónica de su hermano Federico II de Prusia. Fue Gran Maestro de la Estricta Observancia y en 1772 en el convento de Kohlo recibió el cargo de Gran Maestro de todas las logias del rito escocés. En 1782 decició la transformacvión de la Estricta Observancia en caballería benefactora; y en 1786 fue designado Gran maestre de los Hermanos de Asia
La supresión de los grados superiores y la reconducción de los Rituales
de los tres grados simbólicos hacia la antigua tradición masónica
inglesa, fueron objetivos comunes de Schneider, Mossdorf, Schroder y
Fessler. A estos dos objetivos se añadió el del fomento de la
investigación crítica de la historia de la masonería, así como el de la
exigencia, más o menos radicalizada, de la publicación de sus resultados
en libros o folletos dedicados a la instrucción de los Hermanos. Los
logros prácticos de estas cuatro grandes figuras de la masonería alemana
encontraron una interesante condensación entre los años 1800 y 1805. El
influjo práctico de estos hombres estuvo posibilitado, junto a su saber
teórico-crítico, por el hecho de que todos ellos ocupaban en esos
momentos importantes cargos y/o gozaban desde tiempo atrás de un
reconocido prestigio dentro de la Hermandad alemana. Mossdorf, iniciado
en 1777, había desempeñado el cargo de Secretario de la logia
independiente de Las tres espadas de Dresden, desde el año 1789.
Schneider fue nombrado en 1801 Venerable Diputado de la logia
independiente Arquímedes de los tres tableros de Altenburg, una de las
logias con más prestigio en Alemania. Fessler había sido nombrado en
1798 Diputado Gran Maestre de la Gran Logia Royal York de la Amistad de
Berlín, que se había constituido como Gran Logia precisamente gracias a
sus esfuerzos. Schroder, finalmente, había sido nombrado en 1799
Diputado Gran Maestre de la Logia Provincial de Niedersachsen y Bremen
en Hamburgo.
Los resultados prácticos mas relevantes del esfuerzo reformador de estos
hombres consistió en la introducción oficial en todos los grupos de
logias sujetos a las Gran Logia Royal York de Berlín, de «los Rituales
(de los tres grados simbólicos) rectificados por Fessler de acuerdo a la
tradición masónica antigua y original. Un mes más tarde, el 29 de enero
de 1801, la Gran Logia Provincial de Schroder aceptaba oficialmente el
ritual de iniciación ingles antiguo, traducido y moldeado por el mismo
Schroder. El 24 de junio de 1803 la logia de Altenburg sancionaba su
nuevo libro de Constituciones, que había sido remodelado
fundamentalmente por Schneider conforme al nuevo espíritu reformista. En
agosto y septiembre de 1801 se constituyó la Gran Asociación de Masones
formada por las tres Grandes Logias reconocidas por Inglaterra (las dos
Logias Provinciales de Hamburg y Hannover y la Gran Logia Royal York de
Berlin), asociación que fue gestada por el esfuerzo conjunto de
Schroder y Fessler, y cuyo documento constitucional había sido
confeccionado por Fessler en la misma línea reformista.
En 1802 Schroder fundó en Hamburg el Historischen Engbund (la Alianza
histórica selecta), y Fessler, en Berlín, la Gran Alianza de masones
científicos. Ambas Alianzas tenían como finalidad la investigación
crítica de la historia de la Hermandad, y ambas encontraron un
compromiso entre la abolición total de los grados superiores (inviable
por el momento) y su continuación, creando los llamados “niveles de
conocimiento”.
De esta manera, cuando Krause se inicia en Altenburg de la mano de
Schneider, el 4 de abril de 1805, y luego se afilia a la logia de Las
tres espadas de Dresden el 31 de octubre de ese mismo año, encontrándose
allí con Mossdorf, va a serle entonces muy fácil situarse de lleno
dentro de la corriente reformista más avanzada de la masonería alemana
de aquel tiempo.
Extractado de: Enrique Ureña, “Los tres documentos más antiguos de la
Hermandad Masónica de Krause” (Universidad de Comillas), en J. A. Ferrer
Benimeli (coord.), Masonería, Política y Sociedad. Actas del III
Symposium de Metodología aplicada a la Historia de la Masonería
Española, Zaragoza, 1989, Vol. I, pp. 419-428.
Federico II el Grande (1712-1786) fue emperador de Prusia. Durante su reinado (1740–1786) impulsó la codificación del derecho bajo las ideas de la Ilustración; la protección de los más débiles, abolición de la tortura, independencia judicial. Fue un gran protector de la ciencia y de la cultura apoyando a escritores y artistas y estableciendo la obligatoriedad de la enseñanza primaria. En su austera corte recibía a personalidades como Voltaire, Bach, etc. En 1738 fue iniciado en la masonería en una Logia de Brunswick. Aceptó el título de protector de la Masonería prusiana autorizándola mediante un documento fechado en Berlín el 16 de julio de 1774 en donde señala que el fin de la Orden es el bienestar y la utilidad de la sociedad
Guillermo I (1797 1888) emperador de Alemania, iniciado en 1840 en una
reunión de las tres Grandes Logias prusianas; la Gran Logia Nacional, la
Gran Logia Madre Nacional y la Gran Logia de Prusia
Federico III (1831 1888), emperador de Alemania siendo príncipe
heredero, estimulado por su padre el emperador Guillermo II, en 1853 fue
iniciado en la Gran Logia Nacional. Al mismo tiempo se convirtió en
miembro de honor de las otras dos Grandes Logias prusianas; la Gran
Logia Madre Nacional y la Gran Logia de Prusia. En 1860 fue Gran Maestro
de la Gran Logia Nacional aunque renunció en 1874 aunque siguió siendo
protector de las tres antiguas Grandes Logias prusianas
Asamblea de la Gran Logia de Alemania en Dresde (1923)
Asamblea de la Gran Logia Unida de Alemania en 1961 para elegir nuevo Gran Maestre
Asamblea de la Gran Logia Unida de Alemania en 1961
Salida de Gran Maestro electo de la Gran Logia Unida de Alemania acompañado de sus oficiales
Fuente:
http://www.uned.es/dpto-hdi/museovirtualhistoriamasoneria/6historia_%20masoneria_paises/His%20M%20en%20Alemania.htm
http://dialogo-entre-masones.blogspot.com/2015/10/la-masoneria-en-alemania-1760-1810.html